Durante tu viaje por el sureste asiático puedes estar seguro que te vas a mover de mil y una formas, entre las que se incluyen el tren y el autobús. Los más atrevidos van a optar también por alquilar una moto, para moverse de forma interurbana rápida y cómodamente. Sin embargo, el medio de transporte por excelencia, especialmente en las ciudades, es sin lugar a dudas el Tuk-Tuk. De todas las urbes tailandesas Bangkok es la que más tuk-tuks concentra, así que durante tu visita a la capital del país te animamos a desplazarte en tuk-tuk al menos un par de veces. 

tuk-tuk en tailandia


La historia del Tuk-Tuk en Tailandia

El tuktuk es la versión motorizada de los conocidos como “rickshaws”, el carro de dos ruedas tirado por una persona que se puso de moda a finales del siglo XIX. El rickshaw apareció en Tailandia por primera vez sobre 1870, cuando ya era habitual verlos en otras zonas de Asia (principalmente en China). De hecho el rickshaw era tan habitual en China que aparece incluso en cómics como Tintín y el Loto Azul, cuando el aventurero periodista y su perro Milú visitan la ciudad de Shangai en 1934. La ventaja del rickshaw frente a un carro de caballos normal era que, aunque su capacidad de carga era menor, no hacía falta un animal para transportar personas ni mercancías a través de la ciudad. Por esa razón muchas personas de clase baja que no podían permitirse afrontar el gasto que suponía comprar y mantener un caballo o buey optaron por esta nueva versión del carro de transporte. De este modo Tailandia se llenó de carros de mano para el transporte de viajeros y los rickshaws se convirtieron rápidamente en un icono de Bangkok.

De la versión de mano a la versión motorizada

Con el paso de los años el tuk-tuk se fue modernizando -sobretodo para las versiones destinadas al transporte de pasajeros- para mejorar la comodidad de los mismos. Después de la segunda guerra mundial, con la mejora de los procesos industriales y la expansión de los motores de combustión, aparecieron los primeros triciclos motorizados. El primer fabricante que lanzó al mercado un triciclo a motor fue Piaggio, con su motocarro Ape, casi al mismo tiempo que triunfaba con la Vespa. Los Ape todavía son un vehículo omnipresente en toda Italia, especialmente en los pueblos. Su sencillo motor refrigerado por aire lo convertía en una robusta, infatigable y casi irrompible máquina de transporte (aunque fuese a baja velocidad). Los mercados asiáticos no tardaron en copiar el exitoso diseño del Ape para empezar a producir lo que hoy en día se conoce como tuk-tuk.

tuk-tuk en tailandia


Consejos si vas a tomar un tuk-tuk

Los conductores de tuk-tuk son avispados e intentarán siempre sacarte baths extra en cada trayecto. Además hay otros consejos que puedes seguir para disfrutar plenamente de tus trayectos en tuk-tuk:

  • Evita la hora punta: estar en medio de gigantesco atasco sentado en un tuk-tuk respirando el humo de los coches no es demasiado agradable
  • Evita las zonas turísticas: los precios de los trayectos que intentarán negociar contigo son desorbitados
  • Siempre negocia el precio antes de empezar el trayecto
  • No contrates actividades dentro del tuk-tuk: los vehículos vienen con folletos publicitarios de tours, masajes o actividades normalmente más caras que a través de una agencia.